Por el Arq. Pablo Schneider – Lighting Designer / Especialista en tecnología aplicada a la arquitectura.

La luz no solo revela el espacio: lo transforma, lo ordena, lo suaviza, lo dramatiza. En la arquitectura, la iluminación artificial es mucho más que un complemento funcional. Es una herramienta de proyecto. Por eso, hoy más que nunca, el arquitecto necesita incorporar criterios claros a la hora de proyectar con la luz.

En esta nota, quiero compartir 5 conceptos esenciales que no deberían faltar al diseñar la iluminación de una vivienda o un edificio. Si estás desarrollando un proyecto, estos criterios te van a servir a la hora de ponerte a trabajar.

Jerarquía espacial: iluminar no es encender todo

No todos los espacios requieren la misma cantidad ni tipo de luz. Una buena iluminación no implica homogeneidad absoluta, sino jerarquía.

Consejo proyectual:
Diseñá con capas: luz general, puntual y ambiental. Esto te permitirá ajustar la experiencia del espacio según la actividad.

Ejemplo práctico:
Una cocina puede tener una luz general difusa, cinta de led sobre la mesada como luz de trabajo, y colgantes sobre la isla o barra a modo de luz decorativa.

Temperatura de color: la atmósfera también se diseña

La luz cálida, neutra o fría impacta directamente en la percepción del espacio y el confort. No es lo mismo 2700°K que 4000°K.

¿Qué usar y dónde?

  • 2700°–3000°K ? ambientes de relax: dormitorios, livings, circulación, toilette.
  • 4000°?K ? cocinas, baños, espacios de trabajo o alta concentración.

Consejo proyectual:
Siempre debemos mantener la coherencia de temperatura de color dentro de un mismo ambiente o zona funcional. La mezcla puede generar ruido visual.

En la actualidad hay lámparas y artefactos que tienen lo que se denomina “blanco dinámico” Es decir que la tecnología que tienen permite modificar la temperatura de color de la luz y además permiten dimerizar su flujo.

Control y flexibilidad: diseñar escenas, no solo encendidos

Hoy la iluminación se programa. Con tecnologías como dimmers, sensores o sistemas de control por voz, podemos crear escenas adaptadas a diferentes momentos del día o actividades.

Ejemplo práctico:
Una escena “despertar” con luz suave a las 6:30, otra “lectura” a 300 lux, y una “descanso” tenue y cálida 1800°K para la noche.

Consejo proyectual:
Diseñá pensando en el control.

Eficiencia energética sin sacrificar diseño

Hoy contamos con fuentes LED de altísima eficiencia y calidad cromática (IRC >80)

Tips de eficiencia:

  • Elegí luminarias con ópticas eficientes.
  • Aprovechá la luz natural (y automatizá con sensores crepusculares)
  • Optimizá la orientación de artefactos para evitar pérdidas lumínicas.

Diseño centrado en el usuario

La luz impacta en el estado de ánimo, el ritmo circadiano, la productividad y el descanso.

Consejo proyectual:
No hay que olvidarse de pensar en la experiencia sensorial. La iluminación debe acompañar la rutina del usuario, no imponerse.

Hoy proyectar iluminación es proyectar experiencia.

Ya no alcanza con “resolver” el alumbrado. Los arquitectos tenemos la oportunidad de crear atmósferas, generar confort y eficiencia, y acompañar la vida cotidiana desde la luz.

Aplicar estos 5 conceptos en tus proyectos no solo mejora el resultado arquitectónico; también eleva tus propuestas profesionales y hace que te diferencies como diseñador.

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